Necessitas caret lege se puede traducir del latin como: la necesidad carece de ley. La frase fue mal interpretada en el castellano como: la necesidad tiene cara de hereje. El desvío debió fomentarse entre los desconocedores del latin, entre las clases no educadas. Es posible que al pronunciarla encontraron resonancias entre caret y cara, y lege y hereje. Esta deformación fue recogida y recreada por Luis de Góngora en uno de los versos de Dineros son calidad:
“No hay persona que hablar deje
al necesitado en plaza,
todo el mundo le es
mordaza,
aunque él por leñas se queje,
que tiene cara de hereje,
y aun fe, la necesidad:
verdad.”
La deformación popular mantuvo la connotación disidente de la locución original y lo hizo con la figura del hereje que puede ser entendido como alguien que no reconoce la ley o el orden. Pero puede decirse que la esencia de la frase original se sostiene con el sacrificio de la gramática al asumirse una forma no resuelta. La utilidad y significado de la máxima se ponen de manifiesto en su propio sacrificio.